En toda relación erótica he buscado siempre lo que no soy y quisiera ser. Aquellas personas del otro sexo que encontré en mi búsqueda, aparecían prefiguradas en mí. Después, si no encajaban en mi molde, prefería romperlas a ellas antes que romper mi molde.Nuestra relación se acababa.Sospecho que ellas también me acostaban en su lecho de Procusto. Es el mito de Psique y Eros.
Lo primero que me vino la cabeza después de leer el mito, fue, la educación que se imparte en nuestras aulas. La educación es un lecho de Procusto, donde en vez de amoldar el currículo a las características de los estudiantes y profesores, lo que se hace como Procusto, es amoldarlos a un molde único y homogeneizar.
ResponderEliminarLa escuela es un lugar de diversidad de extensas características, donde no a todos nos funciona el sistema establecido como el más correcto, o justo. Para lo que algunos les resulta estimulante, a mi resulta desalentador. ¿Dónde se perdió la idea de que la educación es el vehículo para convertirnos en mentes pensantes con sentido crítico?
El lecho de Procusto está muy relacionado con la vida, un ejemplo sería en los padres,es decir tú tienes que acostumbrarte a las condiciones que ellos te ponen, como cuando te ponen horarios al salir de fiesta, cuando te preparan una comida que alomejor no te gusta,cuando te mandan hacer tareas y cuando te dan buenos consejos para que les hagas caso.
ResponderEliminarMuchas veces en mi vida, me he sentido un caminante acogido por Procusto. Un ejemplo es el desarrollo de la tecnología, pues esta hace que me tenga que adaptar continuamente a ella. Si no me adapto me convierto en un bicho raro diferente al resto, pues, ¿quién es aquel hoy en día que no tiene móvil?
ResponderEliminarRafael Torralba 4ºB- El lecho de Procusto es aplicable en mis relaciones profesionales, ya que cuando tenga un trabajo, mis compañeros se deben adaptar a mi y yo me debo adaptar a ellos, a mi jefe; como los hombres al lecho de Procusto
ResponderEliminarEl lecho de Procusto tiene mucho que ver con la sociedad en la que vivimos. En ella hay unos moldes o cánones a los que todos supuestamente nos tenemos que adaptar para encajar y si no es así serás rechazado. Lo que esto consigue son clones y cuando ven algo distinto en su entorno criticarlo y/o aislarlo. Lo que debería ser en un principio diversidad se convierte en una sola forma de ser, vestir, etc... Esto tiene que ver mucho con la forma de pensar, continuamente te bombardean con publicidad haciéndote ver lo que es supuestamente correcto para encajar ahí.
ResponderEliminarEn mi opinión uno de los grandes lechos de Procusto se encuentra en la moda , pero en este fenómeno en concreto se produce un cambio muy importante , ya que existen muchos lechos que van rotando entre si, pero no existe un Procusto que te alargue o te acorte sino que las personas son las que se acortan o se alargan para poder meterse en el lecho y no ser diferentes al resto y aquellos que no les siguen parecen "gigantes en mundos de enanos" o "enanos en mundos de gigantes"
ResponderEliminarEl lecho de Procusto tiene mucho que ver en nuestras vidas. Muchas veces en mi vida me he visto acogida por Procusto. Un ejemplo es la sanidad cada vez más escasa, tanto en tema personal como en tema de economía, pues eso hace que me enferme más por recetar los genéricos y no los medicamentos verdaderos con marca. ¿quién es aquel que no va alguna vez al médico?
ResponderEliminarYo aplico el lecho de Procusto a la energía vital, ya que ahora que soy joven puedo hacer gran cantidad de actividades, pero cuando sea mayor, no tendré tanta energía y tendré que "recortar" las actividades que realice
ResponderEliminarJULIÁN NIEVA TÉVAR. 4ºB
ResponderEliminarEl mito del "El Lecho de Procusto" se adapta al tema de los estudios, principalmente por dos caminos:
1.- Nos adaptamos a las normas establecidas, es decir, en el colegio e instituto todos tenemos que adaptarnos a unas normas que nos impone el sistema educativo, que en este caso sería Procusto.
2.- Cuando terminamos Bachillerato, pasas a ser Procusto, porque eres tú quien elige lo que quieres estudiar; eliges lo que será el camino de tu vida, pero los problemas van a continuar al terminar la carrera que hayas elegido, ya que debes volver a ajustarte a las normas que te impone la sociedad a la hora de encontrar trabajo.
La economía es un claro ejemplo de lecho de Procusto ya que muchas veces me he tenido que adaptar a ella , los precios de los productos no se adaptan a mí y me tengo que adaptar a ellos al igual que el sistema financiero como los bancos , cada vez que voy tengo que adaptarme a sus condiciones ya que ellos no se adaptan a ti. Alejandro Moreno Mainez
ResponderEliminarEl Lecho de Procusto ha estado en mi vida desde mucho tiempo ,he vivido muchísimos lechos en mi vida y en el que más Procusto me ha cortado y en el mismo momento me ha estirado fue cuando cambie de mi país y pase de ser una ciudadana indígena a una extranjera ,En el lecho me ha cortado mucha libertad de pensamiento,a mi familia ,a mis amigos,mi idioma...etc ,y me ha estirado mucho para adaptarme a la nueva vida y sus medidas ,nuevos pensamientos,nueva cultura,idioma...etc
ResponderEliminarLo primero que me vino a la cabeza fue las relaciones con nuestros padres, que de pequeños nos van cortado y ajustando a lo que ellos llaman educación y tener unos límites, de hasta esta hora sales, de a tal sitio no vas , y conforme vas creciendo te van alargando, te van dejándote tu espacio para que tomes tus propias decisiones, te equivoques y aprendas por ti mismo.
ResponderEliminarEl lecho de Procusto puede ser aplicado a muchos casos en la sociedad. Pero yo voy a hablar de uno en concreto. De las normas, aquellas que nos inculcan desde que somos pequeños y estamos obligados a cumplir en un futuro. Yo quiero comparar el lecho de Procusto con las normas jurídicas de nuestra sociedad. Aquellas normas no siempre son buenas como leyes que provocan el inculpamiento de alguien que ha cometido un crimen o condenar a alguien inocente. La mayoría nos oponemos a leyes como esta o incluso otras sobre lo que antes decían de educación o sanidad. Porque siempre va a faltar algo o sobrar como en el lecho de Procusto. La “justicia" o así se debería llamar en sólo algunos casos no va a ser siempre a nuestro beneficio por lo que intentaremos formarla a nuestro molde con huelgas y protestas que cambien eso al igual que hacía Procusto.
ResponderEliminarRaquel Lapeña Honrado 4°B
ELENA POP COMAN -
ResponderEliminarRelaciono el lecho de Procusto a los círculos sociales , cuando entramos en uno " el líder " muchas veces trata de " alamargarnos " , provocando que hagamos cosas que no queremos o " acortandonos " , haciendo que dejemos de hacer cosas que nos gusta , solo porque a el o ella no le conviene.
Yo creo que el lecho de Procusto es una coincidencia con la forma deserdecada uno y como hay gente que la intenta moldear a su gusto por ejemplo: cuando una persona habla de una manera y a alguien no le gusta intenta cambiarla con burlas, peroesa persona nunca ba a dejar de ser como es. En este caso el burlado seria el viajante del lecho de Procusto y el burlador Procusto y en vezde estirar el cuerpo o cortarlo conforme al tamaño deseado, son las burlas o cosas parecidas.
ResponderEliminarRAFAEL GRANERO MADRID - 4B
ResponderEliminarYo he pensado que una aplicación en la vida cotidiana con el lecho de Procusto pueden ser nuestro círculo de amigos.
Los amigos en la infancia y en la adolescencia, en cierta medida y a unos más que a otros, nos pueden llegar a condicionar de una manera o de otra en nuestros actos y en el día a día en resumidas cuentas.
Relaciono el Lecho de Procusto con la relación de un niño y su juguete, ya que cuando eres pequeño, buscas el juguete perfecto, y cuando no es así, le añades conplementos o le quitas conforme la idea que tengas de tu juguete perfecto.
ResponderEliminarYo relaciono el lecho de Procusto en una relacion , ya que muchas veces se corta la relacion por motivos que a nosotros no nos parecen adecuados ,sus formas de ver las cosas , la forma en la que piensan y no todos somos iguales y queremos adopatarlo cambiar a alguien para que estes conforme es decir hacerlo de la forma que queremos para que sea perfecto para cada uno de nosotros
ResponderEliminarAdapto el lecho de procusto al instituto. Muchas veces los profesores (Procusto) no nos dejan poder dedicar nuestro tiempo libre a actividades que nos gustan, es decir nos acortan el tiempo libre. Y tambien muchas veces nos mandan muchos deberes, examenes... y esto hace alargar las tardes de estudio, todo esto es como si fuera un castigo de Procusto.
ResponderEliminarYo comparo la historia de El lecho de Procusto con la relación entre mi jefe de trabajo y yo. Los comparo porque un jefe le puede estirar lo que quiera el trabajo a su empleado hasta que a él le guste o le parezca oportuno. David Fernández Moya 4ºB
ResponderEliminarAl oír este mito, lo primero que me vino a la mente fue la relación que hay de padres a hijos, es decir una relación entre una figura superior a la otra. Nuestros padres estarían como Procusto, y nosotros en la víctima de tal. Lo relaciono así ya que cuando nosotros pedimos demás, bien sean caprichos, horario de llegada a casa, dinero, etc. ellos nos acortan, nos ponen un límite, en el que dicen que es lo máximo para nosotros. Y cuando por ejemplo, nos piden ayuda, con temas de la casa, estudios, y demás, damos una pequeña parte de nosotros, y ellos intentan sacarnos el mayor partido, como si nos "estiraran".
ResponderEliminarNatalia Ponce 4ºB
María Mondéjar Heras- El lecho de Procusto esta relacionado con nuestra vida diaria, con lo cual yo lo primero que pese al hacer este trabajo era en que cuando tienes mucho dinero puedes gastar cuanto quieras, en cualquier capricho, pero si llega un momento en el que tienes poco hay que intentar conservarlo para no gastar todo y poder vivir.
ResponderEliminarHace unos meses la debilidad de una chica le habló. El chico le dijo que él también la seguía desde que era pequeña y que le gustaría pasar una tarde a su lado. A pesar de que los dos tenían novio se vieron y se dieron cuenta de que estaban hechos el uno para el otro pero que no era el momento de estar juntos. El novio de la chica le pilló las conversaciones, esta le mintió en todo y el novio cegado de amor la creyó. Los dos siguieron con sus vidas viéndose dos o tres veces al año. Mónica Martínez.
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